Editorial en semanario Alégrate 2009

Domingo 20 de diciembre de 2009

¿Tristeza en la Navidad?

Algunos dicen que sienten tristeza en la Navidad. Los psicólogos y los psiquiatras reciben pacientes en este tiempo que padecen estos síntomas, al parecer, tan contrarios al espíritu de la época. ¿Qué es lo que pasa?

Lo que pasa es que son tantas las circunstancias accesorias, o secundarias, que rodean la celebración del nacimiento de Jesús que, si uno se queda solamente en esto, bien puede padecer tristeza cuando de lo que se trata es de la fiesta más grande.

Se suele olvidar lo principal: Dios mismo nos ha regalado a su propio Hijo como salvador y nosotros, los creyentes, lo vemos niño, lleno de ternura, rodeado de María y de José, y creemos que en Él está nuestra salvación. Por un momento nos olvidamos de los sufrimientos y de la cruz y no vemos más que al que vino a salvarnos condescendiendo con nuestra naturaleza mortal (cf Fil 2, 8).

Hay que fijarse en lo que es central y definitivo y no dar tanta importancia a las cosas secundarias, por más que formen parte de nuestro ambiente y de nuestra cultura. ¡Celebre con alegría! ¡Feliz Navidad!

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Domingo 13 de diciembre de 2009

Posadas y Adviento

Ya lo hemos dicho otras veces: las posadas rompen el espíritu del Adviento, pero no lo contrarían, no. Es tal la complejidad de este tiempo que caben los más diversos sentimientos. Ya decíamos de la espera en la segunda Venida y de la necesidad de levantar la cabeza y tener confianza, porque se acerca nuestra salvación (cf Lc 21, 28).

Pero la Corona de Adviento, con sus cuatro velas que se van encendiendo progresivamente, nos recuerda, sobre todo, la primera venida del Salvador en nuestra debilidad y carne mortal.

Y ahora las posadas. Tan típicamente mexicanas, tan queridas. No dejaremos de señalar que a veces degeneran en orgías y borracheras, pero en sí son una cosa maravillosa y llena de ternura. Invento de nuestros misioneros, a quienes les estamos siempre muy agradecidos, por más que reconozcamos que la verdadera misionera se llama María de Guadalupe.

No deje de participar de las posadas y acuérdese, de manera especial, de los niños para que guarden un recuerdo hermoso toda su vida.

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Domingo 06 de diciembre de 2009

Guadalupe está viva

Estudios van y estudios vienen y la devoción de nuestro pueblo a la Virgen de Guadalupe está viva, quizá más viva que nunca. Los historiadores y los antropólogos hacen sus investigaciones y sus hipótesis y afirman unas veces una cosa y otras, otra. Pero el hecho permanece.

El hecho es que nuestro pueblo entró a la fe católica por medio de la Virgen de Guadalupe, que estaba encinta, como que en su seno traía al Redentor de todos nosotros.

También este 12 de Diciembre, las peregrinaciones y los homenajes multitudinarios nos lo van a recordar otra vez.

Alégrate, con todo el pueblo mexicano, rinde homenaje a nuestra Señora, madre dulce y tierna de todos nosotros y, sobre todo, «Madre del verdadero Dios por quien se vive».

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Domingo 29 de noviembre de 2009

Somos adventistas

Ya lo habíamos dicho: también nosotros somos «adventistas», pero en el recto sentido de la palabra. Porque Él ha de venir, pero no sabemos ni el día ni la hora (cf Mt 24, 36).

Es de todos conocido que más de una vez diversos grupos han interpretado los textos de las Sagradas Escrituras en una forma simple y literal y han pensado que ya habían adivinado el día y la hora. Pero esto nadie lo sabe nadie, solamente el Padre.

Pero este domingo, precisamente, comenzamos el llamado Adviento, que tiene un doble significado: la primera venida, en la debilidad de nuestra carne mortal, y la segunda, en el esplendor de toda su gloria.

Nos preparamos, con el símbolo de la “Corona de Adviento”, que poco a poco se está haciendo popular entre nosotros y, sobre todo, espiritualmente, con una espera, con una expectativa llena de fe y de esperanza y, al mismo tiempo, con la ternura y devoción propias de esta época de Navidad.

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Domingo 22 de noviembre de 2009

¿Problema social o problema antropológico?

Nuestro título puede parecer muy elevado e incluso extraño, pero en realidad se trata de algo que está en juego por estos días y del que todos hablamos: ¿qué es el hombre?, ¿cuándo empieza la vida propiamente humana?, ¿cuándo termina la vida humana?, ¿cómo debe ser la familia? Se trata de problemas que se refieren al hombre, de problemas antropológicos.

Esto no quiere decir que ya hayamos resuelto los problemas sociales o sociológicos: ¿cómo deben organizarse los hombres?, la propiedad ¿ha de ser colectiva o de la empresa y de la iniciativa particular? A pesar de la caída de lo que se llama el socialismo «real» y del triunfo al parecer universal del liberalismo o de la empresa privada, los problemas sociales están ahí, vivos y no resueltos. Por un lado, la enorme multitud que vive en la pobreza y por otro, los nuevos intentos de socialismo en varios países de América del Sur.

¿Qué es más grave: lo antropológico o lo sociológico? Y lo peor de todo es constatar que ambas cosas están unidas porque, en parte, ha sido la sobrepoblación, o la procreación irresponsable, la que nos ha llevado al control natal, al aborto y a la valoración positiva de uniones homosexuales.

¿Qué hacer? Una y otra vez hay que proclamar la verdad de los mandamientos de Dios y de la vida según el ideal: uno con una y para siempre, por más que uno parezca rutinario u obsoleto.

«El que tenga oídos para oír que oiga» (Mc 4, 23). Nos referimos especialmente a los diputados y a todos los que tengan alguna responsabilidad respecto de los demás.

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Domingo 15 de noviembre de 2009

Los «testigos» de Dios

Muchas veces se olvida que la palabra mártir significa «testigo» y que testigo es aquel que ha visto y oído y puede confirmar la verdad de un suceso. Los mártires son testigos. ¿Testigos de qué? De que Dios ha intervenido en nuestra historia, de que Dios se ha hecho presente y no nos ha dejado solos en la inmensidad de los abismos celestiales.

Los mártires son testigos por excelencia, o por antonomasia, en cuanto que firman con su propia sangre, dan su vida por la verdad. Así fueron los apóstoles y así han sido muchos a lo largo de la historia. Y uno de los más cercanos a nosotros es el padre Ángel Darío Acosta Zurita, de Naolinco.

No hacía ni 2 meses que el padre Darío había sido ordenado sacerdote en la ciudad de México, por san Rafael Guízar, y fungía como vicario en la entonces parroquia de Veracruz, todavía con el fervor y la devoción que suelen acompañar a los nuevos sacerdotes. Dominguita, su madre, lo fue a visitar porque aún no lo había visto como sacerdote. Y le tocó su muerte cruel.

Al padre Darío y a los santos y mártires nos encomendamos. Porque rojos con la sangre, hoy están en la presencia de Dios e interceden por nosotros y, a la vez, son grandes modelos de fidelidad y coherencia en una vida verdaderamente cristiana.

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Domingo 8 de noviembre de 2009

Anunciar una buena noticia

Es casi un axioma del gremio periodístico: «Good news, no news». O sea, «Una buena noticia no es noticia». Porque curiosamente lo que nos impacta es la sangre, la desgracia, el crimen. Ésas serían las fuentes principales de las noticias además de las de conflictividad y dialéctica.

Esto contradice frontalmente lo que llamamos Evangelio, que literalmente quiere decir «Buena Noticia», y que muchos por desgracia confunden con una catequesis aburrida o con clases más o menos teológicas.

¿Qué es saber anunciar la Buena Noticia? Es haber descubierto que Dios mismo Salvador ha entrado a nuestra historia y nos ha liberado del pecado y de la muerte, de la raza maldita de Adán nos ha hecho hijos del Padre o miembros del Cuerpo Místico del nuevo Adán.

Pero esto sólo lo sabe expresar quien lo ha vivido intensamente, como es el caso de san Pablo y de los grandes como Juan Pablo II, que se valen de todos los medios para ver que llegue lo más lejos y lo más profundo la alegría de Dios en nuestro corazón.

Alégrate quiere ser también portavoz de este anuncio gozoso desde su mismo nombre y quiere que los lectores se identifiquen con el Evangelio y se sientan liberados y salvados y llamados a las buenas obras por Jesucristo y el Espíritu Santo que nos mueve en el interior.

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Domingo 1 de noviembre de 2009

No estamos solos

Una de las cosas más interesantes de las búsquedas en la astronomía es ver si hay vida en alguna otra parte; vida humana de manera especial. ¿Cómo serán esos seres intelectuales que no forman parte de nuestro planeta? Lo más probable es que sí los haya y para ellos Dios habrá tenido otro proyecto u otra dirección.

Pero nosotros sabemos ya que no estamos solos en absoluto si consideramos que formamos parte de una Iglesia donde están también los santos. Casi no nos damos cuenta de ello, pero a cada paso en la Eucaristía nos unimos a la “multitud de los ángeles y de los santos” y aclamamos a Dios cantando el himno de alabanza.

La Iglesia completa, para decirlo con terminología vulgar, es la Iglesia militante –a la que pertenecemos–, purgante –los que todavía se están acercando a Dios luego de su muerte–, y la Iglesia gloriosa –en la que los ángeles y los santos alaban perpetuamente al señor–.

Las tres partes están unidas y se comunican mutuamente en lo que se llama la comunión de los santos. No hay que entenderlo en el sentido de que sólo los santos puedan tomar la santa comunión sino en el sentido de que unos a otros nos ayudamos y especialmente nos ayudan los santos que ya están en la gloria.

En este día de manera especial, recordamos a todos los santos y nos preparamos también para que en el día 2 de Noviembre hagamos una conmemoración de nuestros difuntos, cuya suerte no conocemos pero que esperamos puedan llegar a la gloria de Dios.

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Domingo 25 de octubre de 2009

Nuestro obispo emérito

«Emérito» tiene que ver con jubilado o pensionado. Pero tiene una característica especial. Los eméritos son jubilados del mismo puesto o función que hasta la fecha venían desempeñando. El Diccionario de la Real Academia de la Lengua dice lo siguiente: «Emérito. Se dice especialmente del soldado cumplido de la Roma antigua que disfrutaba la recompensa debida a sus méritos».

Pero nuestro obispo emérito, monseñor Sergio Obeso Rivera, no para de trabajar. Y lo que es admirable, lo llaman de todas partes de la República, especialmente, para dar ejercicios espirituales a los sacerdotes. Es un obispo reconocido nacionalmente.

Monseñor Hipólito Reyes Larios, nuestro actual arzobispo, cuenta con la silenciosa presencia del pastor anterior, que para todos los sacerdotes ha sido un ejemplo admirable, y lo es todavía por su actividad y su discreción.

¡Dios guarde por muchos años a don Sergio Obeso Rivera, que mañana cumple 55 años de haber sido ordenado sacerdote!

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Domingo 18 de octubre de 2009

Nuestro misionero

En la V Conferencia del Episcopado Latinoamericano y del Caribe en Aparecida, Brasil, se propuso la idea de una Misión Continental. Los obispos advierten que hace falta salir de las paredes de los templos y dirigirse a las personas en sus casas o en las calles. Porque son muchos ya los que no asisten a la misa del domingo.

Entre nosotros, el santo Rafael Guízar fue, más que nada, un misionero. Cada una de sus visitas pastorales constituía un acontecimiento de esos que sacuden a toda una población y la hacen escuchar la palabra de Dios fuera de la rutina de la vida diaria. No nos es, pues, extraña la idea de la misión. Se tiene que hacer un llamado especial –espectacular, diríamos- para que muchos que están alejados vuelvan a oír el Evangelio.

De todos modos, el punto focal, o el núcleo de la vida religiosa católica, sigue siendo la parroquia, pero una parroquia renovada, con su consejo pastoral, con sus grupos, con sus coros juveniles, con su oficina de Cáritas y con una atención constante a los pobres y enfermos.

¡Que san Rafael Guízar nos ayude a dar un corazón misionero a todos los sacerdotes!

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Domingo 11 de octubre de 2009

Los días internacionales

Todavía no nos acostumbramos a celebrar debidamente los llamados   «días internacionales». Ahora nos referimos en concreto al Día Mundial de la Alimentación (16 de octubre) y al Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza (17 de octubre). No sabemos quién hace las propuestas, pero siempre tienen que ver con temas que nos deben preocupar a todos.

La erradicación de la pobreza nos toca directamente porque México sigue siendo el país de la desigualdad. Se habla de 50 millones de pobres. Ningún otro país tiene tantos emigrantes como el nuestro en los últimos años. No es fácil erradicar la pobreza porque se trata de un fenómeno muy complejo, una de cuyas causas principales es la falta de educación. Pero es una asignatura pendiente tanto a nivel mundial como más concretamente en nuestra propia patria.

Con esto tiene que ver también el problema de la alimentación. Se dice que la segunda generación de mexicanos que se ha ido a Estados Unidos se vuelve mucho más alta y mucho más fuerte, porque su alimentación ha cambiado sustancialmente; ya no es sólo la tortilla y el maíz. Esto también es una asignatura pendiente.

Alégrate no tiene la solución de estos grandes problemas y no cree que haya que culpar de todo esto a las autoridades. Como se dice, el problema es complejo. Pero es bueno tomar conciencia, estar conscientes de que esto no está dentro del plan del Creador. Cada uno de nosotros tiene que hacer algo para que las cosas cambien.

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Domingo 4 de octubre de 2009

No pasa de moda

San Francisco de Asís no pasa de moda. No lo olvidan, desde luego, los católicos, pero tampoco los protestantes y todos los hombres de buena voluntad que conocen su figura. No nos referimos a su figura física que nos ha dejado Giotto, donde aparece francamente feo y pequeñajo, sino a su figura espiritual, a su alma, quizá la más cercana al Señor Jesús.

¿Qué tenía san Francisco de Asís? Podríamos decir que él, como la madre Teresa de Calcuta, hicieron que sus corazones fueran todo bondad y dejaron que en ellos habitara el Espíritu Santo de una manera casi visible. En medio de sus arrugas y de la insignificancia de sus rostros resplandecía el amor de Dios, que todo lo transfigura.

Es quizá el más santo de los santos o, por lo menos, el que más atrae a cualquiera que conoce algo de su vida y su proceder.

Alégrate aprovecha para mandar un saludo a todos los franciscanos y a los que se llaman Francisco, que entre nosotros son una multitud.

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Domingo 27 de septiembre de 2009

¿Se fueron los ángeles?

Hubo un tiempo en que los ángeles estaban de moda. Todo mundo te hablaba de ello y se sentía una viva devoción, o aprecio, por los ángeles. Pero, si uno miraba las cosas de manera más atenta, se descubría que era una moda o una especia generalizada de superstición que, de alguna manera, conectaba con la doctrina cristiana. Parece que esto ya pasó.

Lo que no ha pasado es la doctrina católica sobre los ángeles como mensajeros de Dios en nuestra vida, por más que los exegetas nos pongan sobre aviso sobre la correcta interpretación de este tipo de figuras.

Es doctrina católica que existen los ángeles junto al trono de Dios y también cerca de nosotros como mensajeros de sus órdenes e inspiradores de lo bueno. Pero también existen los espíritus malignos, o demonios, de los cuales uno tiene que guardarse.

Nos ha costado un poco reunir a los tres principales ángeles, o arcángeles: Miguel, Rafael y Gabriel, en una sola celebración; pero a eso somos invitados para el día 29 de septiembre. ¡Que los ángeles nos protejan y nos ayuden en nuestro camino!